Este sábado me acerqué desde mi casa de Riópar, hasta el Parque Natural de Cazorla, Segura y las Villas, pues la abundancia de aguas de lluvia y los deshielos, indicaban que iba a estar impresionante, y así fue.
El Parque Natural, situado al norte de Jaén y lindando con la provincia de Albacete, tiene más de 214.000 hectáreas, lo que lo convierte en el mayor espacio natural protegido de España y el segundo de Europa. Yo llevo más de 25 años visitando y pateando el parque, y os recomiendo acercaos ahora para verlo en su plenitud de agua, pero eso sí, ni se os ocurra ir en Semana Santa, pues la super presión turística es muy fuerte y no vais a poder disfrutar de sus caminos, rincones y caminos.
En este parque nacen dos de los ríos más importantes de nuestro país, el Segura y el Guadalquivir; este último va recogiendo las aguas de ríos y arroyos más o menos grandes, como el arroyo de la Truchas, y gracias a sus aguas se llena el Tranco, el embalse artificial que está en la cola del pantano, y que en estos días está tan lleno de agua que hay que soltarla continuamente. Es de destacar que en él se encuentra el castillo de las Bujaraizas, hoy hecho isla, y uno de los escenarios preferidos para rodar, que tenía el gran maestro Félix Rodríguez de la Fuente.
Un recorrido cómodo lo podemos hacer entrando por la zona de del embalse, e iremos con el coche tranquilamente disfrutando de las vistas y lo deberemos hacer con cuidado por si algún ciervo o gamo se nos cruza. Agua y más agua se nos aparecen en cualquier curva, en cualquier pared por donde han reventado los viejos veneros. Las fuentes se desbordan, los arroyos secos años atrás presentan cascadas de más de 20 metros o rincones llenos de fantasía, y el tranco siempre a nuestro lado.
Si llegamos a la Torre del Vinagre, podremos descansar, tomar un refrigerio mientras disfrutamos en su aula de naturaleza o en el jardín botánico aledaño.
A continuación bajaremos con el coche hasta la vieja piscifactoría del río Borosa, hoy convertida en un Centro de Interpretación Fluvial, de entrada gratuita y muy didáctico. A pocos metros empieza un camino ancho (ahora convertido en casi río por los nacimientos que a él van a parar), y que va acompañando durante algo más de 4 kilómetros al río Borosa, hasta llegar a la Cerrada de Elías, bello encajonamiento del río, que se recorre por unas pasarelas colgantes de madera. Es la ruta más visitada del parque, pero es muy bonita y sencilla para hacer.
Para terminar nuestra visita podemos acercarnos hasta otra cerrada la Cerrada de Utrero, cerca del nacimiento del Guadalquivir y ver una bella cascada la de Linarejos.
En suma dos rutas senciallas, donde podremos disfrutar viendo fauna y flora como : acebos, jacintos de cazorla, pinos, quejigos, plantas carnívoras o fauna como ciervos, gamos, buitres leonados, águilas reales, picos picapinos y un largo etcétera. Aquí os dejo algunas fotillos, que espero os gusten.
Buenisimas Juan, no dejas de sorprendernos, un abrazo pablo
ResponderEliminarGracias Pablo.
ResponderEliminarEso es Cazorla. Bonitas fotos Juan.
ResponderEliminarSaludos.Manolo.
Gracias Manu!!
ResponderEliminar!Que bonitas Juan ! Y lo que es mas importante:!Cuanto habrás disfrutado haciendolas! ¿Verdad? Antonio y Ana.
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