En Rumanía, encontramos un paraíso natural especial para los fotoógrafos, ornitólogos y naturalistas, es el Delta del Danubio, el delta mejor conservado de toda Europa.
Partiendo de la ciudad de Tulcea, en cualquier embarcación que organiza excursiones diarias por sus aguas o bien alquilando una por nuestra cuenta (60€ por cuatro personas, medio día), esta opción es más recomendable aunque un poco más cara, pero estas barquitas tienen menos calado y por tanto nos pueden meter por canales y lagunas interiores, que de otra manera sería imposible acceder a ellas.
El Delta del Danubio, con sus casi 3.500 km2, está declarado Reserva de la Biosfera y Patrimonio de la Humanidad, por su riqueza faunísitica, especialmente por sus 300 especies de aves catalogadas. Cuando vamos navegando plácidamente por el cauce principal del Danubio o cualquiera de sus ramales o lagunas, encontramos garzas, garcetas, moritos, cisnes, cormoranes, carracas, garcilla cangrejera, pelícanos y un largo etcétera de aves acuáticas que se alimentan en estas aguas o sus orillas. La riqueza de las aguas la convierten en un lugar ideal para que exista un gran número de pescadores, que o vienen de los pueblos cercanos o bien viven en pequeñas cabañas de madera a lo largo del río.
En suma, un lugar al que antes o después hay que ir si te gusta la fotografía, los viajes, los paisajes y la ornitología.
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